Washington, 31 ago (PL) El presidente estadounidense, Donald Trump, pareció confirmar la veracidad de un reporte de prensa según el cual el mandatario se niega a hacer algún tipo de concesión en las conversaciones comerciales con Canadá.
El diario canadiense Toronto Star reveló este viernes que en una entrevista concedida ayer a la agencia Bloomberg, el gobernante declaró extraoficialmente que no haría ningún compromiso en las negociaciones sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con Ottawa.
Según el medio, que citó una fuente familiarizada con la entrevista, el jefe de la Casa Blanca dijo que no podía expresar su criterio sobre el tema públicamente porque sería tan insultante «que no van a poder hacer un trato».
En otra observación que no quería que se publicara, Trump sostuvo que el posible acuerdo con el vecino del norte sería «totalmente conforme a nuestras condiciones», y sugirió que estaba asustando a los canadienses para que se sometieran, al amenazarlos repetidamente con imponer aranceles.
«Confidencialmente, Canadá está trabajando duro. Y cada vez que tenemos un problema con un punto, simplemente pongo una foto de un Chevrolet Impala», expresó en referencia al auto que se produce en la planta de la compañía General Motors en Oshawa, en la provincia de Ontario.
Wow, hice comentarios off the record a Bloomberg con respecto a Canadá, y este poderoso entendimiento fue violado. Oh, bueno, solo más informes deshonestos. Estoy acostumbrado a eso. ¡Al menos Canadá sabe cuál es mi posición!, escribió el mandatario esta tarde en su cuenta de Twitter.
El reporte de las palabras del jefe de Estado podrían tener un impacto en las negociaciones que llevan a cabo los dos países para modificar el mecanismo vigente desde 1994, luego de que Washington alcanzó un acuerdo preliminar el pasado lunes con México, el otro miembro del Tlcan.
Trump advirtió que podría llegar a un trato solo con el país latinoamericano y cobrar aranceles a los automóviles fabricados en Canadá si Ottawa no participa, aunque para ello necesitaría el apoyo de un legislativo que quiere la presencia del vecino del norte.
Un punto difícil de aceptar para el Gobierno de Justin Trudeau es el interés de Washington en deshacerse del mecanismo de resolución de disputas del Capítulo 19, que ya México accedió a remover.
El presidente estadounidense también quiere eliminar los aranceles impuestos por Canadá a los lácteos, bajo el argumento de que perjudican a los agricultores de su país, pero eso entra en contradicción con los productores lecheros canadienses, que ejercen una gran influencia política.